lunes, 11 de junio de 2018

Mediación Familiar Preventiva


Haynes en su libro Fundamentos de la mediación familiar decía que había que devolver a la familia la capacidad de que ellos mismos resolvieran sus problemas.

Hace unos años tuve la ocasión de participar en un Congreso a puerta cerrada sobre crisis familiares en Madrid, desde diferentes profesiones analizábamos aquellos aspectos a mejorar en las relaciones familiares, para preservar la familia como institución social.

Cuando trabajas con familias y sobre todo con parejas, es necesario entre realizar terapia de pareja y realizar una mediación por separación o divorcio, algún otro mecanismo intermedio.

Las parejas acuden a mediación, en algunas ocasiones porque uno de ellos desea separarse, y me he encontrado que con el paso del tiempo, una parte no entiende las razones por las que el otro desea separarse. Esto es más frecuente en aquellas parejas que casi nunca discuten, pero tienen pocas posibilidad de expresar lo que sienten. Por lo que inicié, una fase cero de mediación preventiva., para analizar las razones de separación o divorcio, con el objeto de facilitar el entendimiento de la otra parte.

El resultado fue que algunas personas se separaron al comprender las razones y esto ayudó a facilitar el proceso de mediación, pero mi sorpresa inicial fue que otras parejas decidieron continuar con su relación.

Sabemos que todos los conflictos interpersonales son conflictos emocionales, por lo que debemos en caso de secuestro de la amígdala dar tiempo a las partes para bajar la intensidad emocional, dejando unas semanas para ello, pero no es conveniente que pase más de un mes. Entonces debemos de reunir de nuevo a las partes e iniciar el procedimiento preventivo o la mediación en sí misma.

Debemos tener en cuenta algunos mitos de resolución de problemas en pareja que puede afectar en la toma de decisiones correcta:

- "Debemos de darnos un tiempo", "pongamos distancia entre nosotros", esto sólo contribuye al distanciamiento de la pareja, no mejora la relación e incluso puede contribuir a la escalada emocional del conflicto, con el paso del tiempo.

- "Mejor no hablar, dejemos que se resuelva solo", sabemos que sólo existe una única forma para resolver conflictos, hablando sobre las emociones de cada uno de ellos, poniéndose en el lugar del otro y buscando soluciones que contribuyan a mejorar la relación.

- "Si esto es así, será porque el destino lo quiere", esto refuerza la idea de inactividad, al contrario las cosas nos pasan porque nosotros queremos que nos pasen, por lo que nosotros decidimos en cada momento qué hacer para resolver nuestros problemas.

- "Lo hablo con mi familia o con mis amigos", cada uno tiene su opinión de lo que es el problema o de cómo es el otro, pero sólo las partes pueden decidir por ellas mismas, ya que son sus emociones, lo que sienten, no el sentimiento de los otros.

Estos casos son objeto de mediación familiar preventiva, ya que suelen ponerse sobre la mesa algunas de estas creencias distorsionadas y al hablar las partes entre ellos, empiezan a caer los "deberías", los mitos, por lo que se produce el acercamiento entre las partes.

Siempre debemos de hablar las cosas, cuánto antes mejor, el "ya hablaremos" sólo puede contribuir a empeorar las relaciones, dejaremos un tiempo para bajar la intensidad emocional, facilitaremos el diálogo, es posible que surja el perdón entre ellos, o el entendimiento, o el reconocimiento del otro.

Hablando se entiende la gente, este es el mayor fundamento de la mediación!!!

Os dejo un enlace que espero os pueda interesar: 
https://www.youtube.com/watchv=i2koRXwXA80&list=PLM2LwRSDj2rp_tN8VIZ42ytOhgwRa5pF5&index=4&t=1s

sábado, 9 de junio de 2018

Qué papel juegan las emociones en un conflicto


¿Somos seres emocionales o racionales? 

Ante esta pregunta las repuestas suelen ser diferentes, algunas personas consideran que depende de las situaciones nos comportamos somos más o menos emocionales, en otras ocasiones contestamos quizá sea un 50% para cada una de ellas.

Lo que les llama poderosamente la atención es el porcentaje emocional, somos 80 por ciento emocionales.

Para poder responder a esta pregunta con base científica debemos acudir a la Psicofisiología o la Neurociencia.

El cerebro humano está compuesto por tres cerebros, el primer cerebro el reptiliano, es el más primitivo de todos, formado por el encéfalo y el cerebelo, su función sería la supervivencia de la especie humana.

El segundo cerebro es el llamado cerebro límbico, este es el cerebro relacionado con las emociones, que compartimos al igual que los animales.

Y por último, la neocorteza que es la sede del pensamiento sistemático y lógico.
Las neuronas racionales se encuentran además en el lóbulo frontal. Este cerebro es el que nos diferencia de los animales.

¿Por qué somos emocionales? 

El cerebro límbico es más antiguo en el tiempo,  su función es la supervivencia de la especie, no para ser felices.

Al ser anterior en el tiempo a la neocorteza, tenemos más número de neuronas que van desde lo emocional a lo racional. Luego somos seres emocionales.

En el libro "¿Por qué las cebras no tienen úlcera? se explica el funcionamiento del estrés de una forma divertida.

Las cebras disparan sus niveles de cortisol ante el estrés producido por la aparición de un león, pero cuando el león desaparece en escena, los niveles de cortisol disminuyen.

En el caso de las personas no ocurre lo mismo, la mayoría de las ocasiones, seguimos pensando que vivimos en la sabana y que si bajamos la guardia el león nos va a comer, por lo que los niveles de cortisol aumentan y permanecen altos durante mucho tiempo.

Como vemos nos resulta fácil vivir desde el miedo y en ocasiones se produce lo que llamamos el secuestro de la amígdala, como sabemos la amígdala es la hormona que se activa cuando tenemos miedo, con forma de corazón, se sitúa en el sistema límbico.

Cuando se activa la amígdala, los niveles de cortisol aumentan de manera exponencial, produciendo un cambio hormonal en los neurotransmisores, dopamina, serotonina y oxitocina, produciendo un caos a nivel emocional. El aumento crónico de los niveles de cortisol hace que tengamos menos memoria y disminuye el colágeno, por lo que produce un envejecimiento de la piel.

Cuando vienen las partes a mediación independientemente del ámbito en el que trabajemos, el secuestro de la amígdala suele estar presente en alguna de las partes, por eso a veces vemos dificultades para poder continuar con la mediación, ya que las emociones bloquean la posibilidad de pasar de la posición al interés, primero tendremos que facilitar la expresión controlada de las emociones, quizás por mediación  de un caucus, antes de poder pasar a la fase de búsqueda de alternativas o negociación.

Somos seres emocionales y nuestras decisiones se encuentran condicionadas por las mismas, ¿qué emociones queremos sentir?, ¿qué emociones queremos contagiar?


Recomiendo que veáis este programa de Yo Mono de Pablo Herreros para una mayor comprensión del cerebro y de las emociones: http://www.rtve.es/television/yo-mono/







sábado, 2 de junio de 2018

En busca de tus sueños!



Hay momentos en la vida en los que decidimos mirar hacia atrás, observamos y analizamos con detenimiento qué cosas hemos hecho y qué cosas podríamos hacer. Nos hacemos preguntas sobre si hemos conseguido la felicidad, si lo que hacemos nos acerca más aquellos sueños que algún día pensamos que nos gustaría conseguir o aquella persona que siempre hemos querido ser.

Quizás sea un momento de cambiar, pero cambiar siempre asusta, supone mover estructuras no sólo mentales, pasar a la acción, pasar a la acción es difícil pues requiere un gran trabajo y esfuerzo por nuestra parte.

Quizás tememos morir de éxito, muchas personas tienen miedo a que las cosas que les pasan sean positivas, por lo si lo bueno viene asociado posteriormente con acontecimientos negativos. Se plantean y si lo que estoy sintiendo ahora, esta felicidad no dura mucho tiempo, qué puede llegar a ocurrir. Por lo que el miedo al éxito les paraliza para poder seguir trabajando en búsqueda de sus sueños.

O por otra parte, nuestro mayor miedo sea el miedo al fracaso, a la que tememos que pueda llegar a pasar en negativo, el miedo a la desconocido, a la incertidumbre y por ello nos quedamos con fórmulas como "más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer".

Ir en busca de nuestros sueños requiere salir de la zona de pánico y para ello Albert Bandura explica que hace falta una gran dosis de coraje, valentía e irracionalidad. Para él la gente razonable se adapta al mundo, mientras que los menos razonables son los que intentan cambiar el mundo. El poder reside en la autoeficacia.

Si tú crees que puedes conseguir el éxito en la vida y perseguir tus sueños lo conseguirás, a pesar de los obstáculos que te encuentres en el camino, a pesar de las veces que te caigas y tengas que levantarte. Porque encontrarás los mecanismos psicológicos para pensar en positivo y tener emociones positivas que te ayuden a dirigirte hacia delante. Pensar en positivo nos lleva a tener una conducta más proactiva a la hora de alcanzar nuestros sueños y el éxito que buscamos, consiguiendo que nos sintamos más felices.

Si por el contrario crees que no podrás, tus creencias limitantes y tus pensamientos negativos, te confirmarán que realmente no eres capaz. Tanto si piensas que puedes como que no podrás, a estas creencias se les llama "profecía autocumplida". 

Para Bandura, la autoeficacia se basa en las creencias de nuestras capacidades para conseguir todo aquello que queramos en la vida, por eso nuestras metas y nuestros sueños no pueden ser pequeños, deben de ser grandes, debemos pensar que nuestros límites son mentales y que podemos conseguir todo aquello que queramos en la vida. Porque estas creencia afectan a cómo pensamos, sentimos y actuamos.

Marisa Salanova nos explica que para fortalecer las creencias de autoeficacia debemos recodar experiencias de éxito del pasado, recordar aquello que hicimos bien y nos generó emociones positivas.

Por otro lado debemos de buscar personas a las que admiramos, que nos sirvan de modelo, qué podamos pensar que si ellos han sido capaces de conseguir el éxito y sus sueños nosotros también.

Debemos rodearnos de personas que sean importantes para nosotros para que nos proporcionen el apoyo suficiente para seguir adelante. Con palabras bonitas, con abrazos y sonrisas, con reconocimiento sobre lo que hacemos.

Por último, trabajaremos en nuestra inteligencia emocional, para generar emociones positivas, ya que la alegría, el entusiasmo, nos ayudan a ser más creativos y a encontrar soluciones a la mayoría de los conflictos que surgen con uno mismo o con los demás.

Si crees que necesitas un cambio, que no terminas de ser feliz, adelante es hora de perseguir tus sueños, introduce un toque de locura, busca lo que te apasiona y lucha por conseguir tus sueños, estarán más cerca de lo que piensas.

Gracias a Juan Pedro Sánchez por regalarme la Palanca del éxito, un libro que no puedes dejar de leer.